martes, 19 de junio de 2012

Esperar


No creo que veas esto, Incluso no creo que me veas a mí,
espero tanto por algo que perdí en mi iluminoso camino,
espero tanto que me obligas a perder mi ilusión, ya no hay
sonrisas, ya no hay frases milagrosas que arrelaran mi vida
no es que no te siga el paso, pero es todo lo contrario, te sigo
tanto que me duele lo que enseñas, grandes logros, que
congelan mis esperanzas de encontrar algo pequeño
algo sencillo que torne mis ojos rojos en brillo sin 
lamentos, 
trato de construir algo que no lamentar, trato de ser una chica
normal, pero no me puedo enamorar, solo llorar porque 
desearía que esa chica volviera a mí,
y solo pienso en que me quedaría toda la vida por ti, 
en que soy feliz siendo así, tratando de manipular cada instante
de mi vida, tratando de generar paciencia, tratando de 
olvidarte cada día mas,
a veces deseo lo mismo, a veces me burlo de eso, a veces
quisiera regresar el tiempo, a veces quisiera perderme en el, 
a veces quisiera que toques mi espalda, a veces quisiera
no tener porque mentir, a veces, quisiera que me veas, a veces
tan solo caminar, a veces tan solo perdonar, pero eso somos
pero eso eres, pero que seremos, el final ya lo sabes, 
mi final se ve, pero no se porque pasó tan rápido,
y no se, para que me quieres una vez mas, pues me duele, pues
aún seras algo mas, seras mas, seras tú, seras yo, 
quizá dejé de escribir porque sabía que lo leerías, quizá
quisiera ser explícita y dejar de soñar que esto se solucionará
pero solo me entrego al tiempo, me envuelvo en sus movimientos
en sus ojos perdidos por el humo, en sus mentiras de que no
volverá a fumar después de aquella noche, aquella noche donde 
revivo mis recuerdos muertos, aquella noche donde quería perder
mis tabús, donde quería tocarte sin esperarte un día mas, 
donde el aroma de tu perfume me pierde, donde soy feliz, pero
incapaz de hacer algo porque seas mío una vez mas, 
no creo estar haciendo lo correcto, pero me llena 
el alma, 
me hace querer esperar todo lo que sea necesario,
donde no hay palabras fuertes, ni acalorados momentos, 
ni prejuicios, y quizá como me dijo un amigo, empezar algo nuevo
y no seguir encaminando el pasado, 
porque cambiamos, porque ahora recién comprendo lo que es
dormir y no domir, lo que es esperar y que te engañen, 
donde me conformo con una figura y no con tocarte, donde cada
esperanza la llevo tatuada para ver si aún deseas algo de mí,
y es deshonesto decir que me conformo con una amistad, pero
es lo que me queda, es con lo que todo comienza, 
y es donde mi manía de soñar termina.

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